La gestión de herencias es un proceso delicado que requiere atención a los aspectos fiscales, que varían según la Comunidad Autónoma de residencia del fallecido. En algunas regiones, el impuesto de sucesiones es más bajo, por lo que una gestión adecuada puede minimizar impuestos y costes.
En la actualidad, los notarios desempeñan un papel crucial en muchos aspectos legales de nuestra vida cotidiana, y uno de los avances más recientes es su capacidad para tramitar los Expedientes Matrimoniales.
Entre los trámites de separación y divorcio, uno de los aspectos más relevantes es la custodia de los hijos. En la Notaría de Alberic P. Noguera, te asesoramos sobre los pasos adecuados a seguir para que puedas abordar este proceso de manera correcta con tus hijos.
La separación o el divorcio ante notario requieren el mutuo acuerdo y que no existan hijos menores no emancipados o con discapacidad que dependan de sus padres. Cumpliendo estas condiciones, se debe acudir a la notaría con un abogado y el convenio de divorcio redactado.
Qué es el servicio o acto de compraventa de acciones o participaciones de una empresa y que debo aportar a la notaria.
En ciertos momentos, es fundamental que una persona delegue en otra para actuar en su nombre, y el poder notarial es el instrumento legal adecuado para ello.
Tras el fallecimiento de una persona, sus bienes pasan a formar la denominada herencia yacente, una situación temporal que termina cuando los herederos implicados aceptan la herencia, dando paso al proceso de distribución de los bienes según corresponda legalmente.
Si planea casarse y desea un régimen económico distinto al establecido en su Comunidad, o si ya está casado y desea cambiarlo, puede acudir a un notario para formalizar capitulaciones matrimoniales.
La escritura de compraventa es el documento mediante el cual las partes pactan la transmisión de bienes muebles, inmuebles o derechos, en el que una de ellas adquiere dichos bienes a cambio de un precio acordado entre las partes.
A través de la escritura de herencia, se manifiesta la voluntad de aceptar o renunciar al derecho de sucesión. Además, se enumeran los bienes y derechos del fallecido, y se procede a su distribución entre los herederos de acuerdo con lo establecido.